Rizador de pestañas
Para utilizar este producto has de tener las pestañas recién lavadas para que estén limpias y mojadas a fin de conseguir el mejor resultado. No es una herramienta difícil de usar puesto que solo ha de acercarse a las pestañas, ponerlas en en y apretar unos segundos para abrir con cuidado después. Siempre hay que mantener el contacto visual en el espejo, no apretar y cerrar los ojos puesto que no vamos a sufrir ningún dolor, salvo que tires de ello sin haber abierto o demasiado rápido pudiendo arrancarte las pestañas y hacerte mucho daño.
Para ayudarte a no coger parte de la piel del párpado puedes levantar las cejas un poco y de esa manera salvar esa parte. En el mercado hay muchas formas de rizadores de pestañas. Si es posible, deberías probar antes de comprar pues hay unos más planos y otros más curvos y redondos dependiendo de la forma del ojo.
Precauciones rizador de pestañas
Con el rizador de pestañas, algo que nunca debes haces es calentar el rizador. Si lo calientas puedes acabar quemándote la piel y las pestañas y éstas tardarán en crecer.
Teniendo en cuenta estos consejos, puedes utilizar esta herramienta sin problemas pero siempre con seguridad. Si no te ves capaz mejor no la uses porque te pondrás demasiado nerviosa y no conseguirás el mejor resultado.